«Poco a poco, pedacito a pedacito, familia por familia, se puede hacer mucho bien en muchos niveles».
Elinor Ostrom
No pensaba escribir esta idea hasta más adelante, hasta que me he acercado esta mañana por cuarta vez al Registro de Soto del Real donde vivo. Las 4 veces el trato ha sido impecable, las 4 veces me han llamado antes para confirmarme que ya podía pasar, las 4 veces me han dicho “usted es Alejandro, ¿verdad?”. Hoy incluso me he permitido decirle a la mujer “qué gozada venir aquí comparado con el registro en Madrid Centro” y ella me ha respondido “me consta que sí”.
Y aquí abriré fuego con un tema conflictivo.
¿No nos estará haciendo daño el ser “nacionalistas” aunque no lo queramos ser?
Puede que nos esté perjudicando pensar que necesitamos un estado que reparta las vacunas o, más bien, confiar en un Estado que reparta las vacunas. Realmente, sobre mis necesidades concretas sabe responder mucho mejor (por un tema de cálculo económico puro) el Ayuntamiento de Soto del Real antes que el Reino de España.
Viviría mejor en la comarca del Hobbit Frodo, tomando las decisiones que me afectan como vecino de “Bolsón Cerrado” que teniendo que escuchar opiniones de un tal Gabriel Rufián, y que paradójicamente me gobierne. Solo pensar que parte de mis impuestos financian a Gabriel Rufián de verdad creo que me resta años de vida, además de aumentar mi deseo de huir a Andorra.
Una vez superado este “calentón”, vuelvo a mi amigo Edu, homenajeado en el título y me encuentro con este texto que él rescata de Vincent Ostrom (marido de Elinor, Premio Nobel de economía de 2009):
As one where many elements are capable of making mutual adjustments for ordering relationships with one another within a general system of rules where each element acts with independence of other elements. Spontaneity, in the sense that individuals will be led to organize elements in a polycentric order, initiate self-enforcing arrangements and alter basic rules, is explored as an attribute of a polycentric order.
Siento que la pandemia ha demostrado que todo es más eficiente cuando es más manejable. Asignar los recursos de Soto del Real debe ser más sencillo que asignar los recursos de cualquier “Plan quinquenal” de la URSS o del “Salto adelante” de Mao.
Nadie sabe qué es lo mejor para mi, ni yo sabré jamás qué es lo mejor para los demás, sin embargo, creo que tengo más que ver con mi vecino de Soto, es decir, con la mujer que trabaja en el registro que con ceutí por irme a un ejemplo extremo. A la hora de asignar recursos como la vacuna, es más fácil organizar una comarca que un país. Si tenemos dudas, el ejercicio ideal sería preguntar a Illa si fue más sencillo gobernar “La roca del Vallés” de 10.000 habitantes o ser el Ministro de Sanidad durante la pandemia.
Me veo obligado a dejar dos links de mi amigo Edu porque explican a la perfección el concepto y porque escribe, además, como los ángeles. Espero os gusten.
Alejandro de León