Quien haya leído algunas de mis 100 ideas sabe que propongo gobernar sobre el premio más que sobre el castigo. En esta idea, la 36, no cambiaré mi aproximación al tema.
Podríamos premiar a las empresas que, permitiendo el trabajo en remoto, reduzcan las emisiones de CO2. Os dejo una noticia del impacto tan generoso que tuvo el confinamiento.
¿Cómo propondría hacerlo?
Conste que creo que no podemos obligar a una empresa a permitir el teletrabajo de manera perpetua, pero sí podemos ofrecer una solución 3×2 (3 días de oficina y 2 en casa o viceversa).
Además, desde el ayuntamiento y solo a las empresas que elijan acogerse a esto, se les puede plantear un calendario de días en función de sus empleados.
Me explico:
- La empresa A puede ir a la oficina los lunes y viernes; la empresa B puede ir martes y miércoles, y así sucesivamente. Solo por hacer desaparecer parte de los atascos suena a bendición total.
- Incentivar con el equivalente a créditos de carbono. De este modo, las empresas podrían ahorrar en el pago de sus impuestos en función de los gases que han dejado de emitir.
Tan sencillo pero tan lejano.
Por último, basta con leer la noticia en el link arriba indicado para ver que el 62% de la gente está cómoda teletrabajando, por tanto, una vez más la oportunidad está en nuestras manos.
Alejandro de León
1 comentario
200% de acuerdo, muy interesantes tus ideas Alejandro 👍