España vive muchos dramas, desgraciadamente. El identitario, el de la valentía, el económico, el populista y alguno más, pero si tuviera que elegir uno, sobre el que creo que tenemos que poner remedio urgente, es el paro juvenil.
Primero, porque un país que no da oportunidades a sus jóvenes, los pierde. El talento no espera en su casa viendo Telecinco.
Segundo, si queremos atraer (y no solo retener) el talento inmigrante, debemos crear oportunidades para que los inmigrantes vengan aquí a aportar valor. Recuerdo que más del 50% de las empresas en EEUU están montadas por inmigrantes y más del 50% de los CEOs del S&P500 también lo son.
La tercera razón es que un país que no genera empleo juvenil, genera corrupción juvenil.
Aquí propongo dos ideas para intentar aliviar el drama que vivimos, que se unirían a la idea 12, que es básicamente variar el Salario Mínimo en función de los años cotizados.
PRIMERA IDEA:
Hay que fomentar masivamente la Formación Profesional. De cajón. Sobre todo ahora que una formación profesional puede tener relación con la tecnología y tenemos miles de trabajos tecnológicos alrededor.
SEGUNDA IDEA:
Una vez fomentada, sospecho que sería imprescindible hacer esto a continuación: una campaña de marketing para quitar el estigma de “fracaso” que tiene no tener una carrera. Sí, semejante estupidez.
Mi carrera se inició en Suiza, mi jefe era mecánico de formación, con una FP de toda la vida había llegado a ser Executive Director en Morgan Stanley. Nadie jamás había dudado de su valía, porque el mercado, y un gran mercado como el que hay allí, premia el valor añadido. Ni el título universitario ni el esfuerzo, solo el valor añadido para tu compañía.
Alejandro de León